La custodia alternativa -comúnmente conocida como custodia compartida- es el sistema de custodia alternado entre los progenitores separados o divorciados.
¿Qué tipos de custodia compartida existen?
En principio en función del formato organizativo de la custodia de los menores, la custodia compartida se puede sistematizar en tres modelos:
- Custodia de alternancia de los menores : En este sistema serán los menores quienes trasieguen de la vivienda en la que el padre y la madre hayan fijado sus residencias tras la separación o divorcio
- Custodia de alternancia de padres: En este formato de custodia, serán los progenitores quienes alternen la residencia en la vivienda habitual, que es ocupada de forma estable por la prole
- Sistema mixto: Aunque son los padres quienes alternan el uso de la vivienda habitual, ocupada por los menores custodiados, los progenitores también alternan el uso de una sola vivienda que sirve de residencia de ambos en los periodos no custodios
¿Cuándo el menor es quien trasiega de casa, como debe organizarse la custodia?
Especialmente si es el menor o menores quienes alternen su residencia cambiando de forma semanal o quincenal entre la paterna y la materna, deben procurarse los siguientes elementos y disponerse las siguientes dotaciones que garanticen la estabilidad de los hijos custodiados:
- Se deben mimetizar los enseres y medios de los menores en ambas residencias -paterna y materna- a fin de minimizar el impacto del cambio de la vivienda
- Ambas viviendas de los progenitores deben encontrarse equidistantes del Centro Escolar de los menores
- Se deben adecuar los horarios de la cotidianeidad de los menores en ambas residencias, homogeneizando las entradas y salidas, horas de estudio, comidas, etc. A fin de unificar la costumbre y el ritmo vivencial de los menores en ambas viviendas
- Las desventajas de la custodia compartida para los padres:
- Aumentan los costes de manutención, ya que ambos padres deben mantener en sus respectivas viviendas un lugar apropiado para los hijos, proveyéndose por duplicado de muchos elementos, enseres, útiles y otras necesidades personales, educativas y de ocio de los hijos
- Obligada proximidad de ambos hogares. Para la mayoría de la formas de implementar este sistema resulta muy conveniente el que ambos padres residan cerca el uno del otro, y una equidistancia al centro escolar de los hijos
- Necesidad de una mayor flexibilidad laboral de ambos progenitores. Es imprescindible que la forma de sustento de cada padre permita un horario flexible, al menos alternativamente y en consonancia con los tiempos custodios, que se adapte a cubrir las necesidades de tiempo para el cuidado de los hijos
- Las desventajas del sistema de custodia compartida para los hijos:
- La necesaria adaptación personal y habitacional a dos viviendas diferentes, con dispares hábitos, reglas, horarios, etc.
- Los niños deben adaptarse muchas veces a dos formas distintas de encarar la vida, a costumbres disímiles, a normas de educación diferentes
- Algunos problemas y dificultades prácticos y logísticos, derivados de los cambios de hogar y de lo que una alternatividad residencial provoca en la estabilidad social de los menores
- La custodia compartida se erige como un sistema cada vez más actual y extendido. Hay casos en los que esta custodia es positiva y otros en los que puede resultar perjudicial para los menores
En Bufete Velázquez somos abogados especialistas en custodia compartida y sabemos cómo tramitarla, cómo defenderla, y también cómo impugnarla cuando no se den las condiciones necesarias para que el bienestar de los hijos sea el óptimo.